martes, 12 de febrero de 2008

PORQUE NO ME DA LA GANA!


Siguiendo el ejemplo y consejo de Zapatero, no me callo. Y no me callo porque no me da la gana, porque estoy harta, porque tengo voz, y porque tengo principios.

Llevo indignada varios días, desde la buena nueva del Partido Popular. Mi primera reacción ante tal acto incalificable (dejémoslo así, que si lo califico me encendería más, y no se lo merecen). Desconcertada, entro en la página web del PP, a comprobar si lo que estaba viendo y leyendo en tantas noticias era cierto o mi cabeza estaba modificando la información de forma poco objetiva. Pero no, por desgracia, era cierto. Atónita, después de leer esa gran frase en la que le doy la razón al candidato del PP (hablamos de “Los españoles hemos acertado siempre cuando hemos mirado hacia delante”, y, efectivamente, miramos hacia delante, y no volvemos la vista a hace unas décadas con el orgullo y la lágrima en el ojo como hacen ellos), me dispongo a leer eso que llaman su proyecto electoral. En fin, apretando los dientes y procurando no contestar en voz alta a un ordenador que no me escucha (exactamente igual que el PP, podría haberlo hecho, habría surtido el mismo efecto), leí esa gran propuesta, hablamos de su idea de la integración de la inmigración en España. ¿Cuál fue mi sorpresa? Que en sus “ejes básicos del programa político” ni dejan nada claro, ni se mojan, ni dicen nada, es decir, que hacen lo de siempre. No contenta con eso y con ansias de informarme para saber más, para enterarme de qué quiere hacer la derecha con mi país, me he dedicado estos días a recopilar sus propuestas e ideas sobre el tema. Y de mi “estudio de propuestas” he salido con rabia contenida, indignación y mayor convencimiento de que no llevan razón, no la van a llevar, y no tienen principios ni éticos ni morales.

Señor Rajoy, usted no aboga por una integración inmigrante en España respetando su cultura y costumbres, usted ha retrocedido cuarenta años en el tiempo y se dispone a imponer lo que usted piensa por encima de todo, por encima de las personas, que es lo más denigrante que un político puede hacer. Señores Rajoy, Cañete, Aguirre y demás hienas ultraderechistas en general, yo soy española y no soy católica, no pertenezco a ninguna religión y estoy completamente en contra de ellas. Si ustedes van a prohibir el velo en las aulas (por poner un ejemplo), que es un símbolo religioso y cultural, entonces ¿por qué no prohíben que otros niños vayan con crucifijos colgados del cuello? Al fin y al cabo es otro símbolo, y a mi, como española puede molestarme de igual manera. Hablan ustedes de “recuperar” nuestra posición en el mundo, de “volver” a darle el valor que se merece a la política exterior. Y pretenden hacerlo como su partido ha venido demostrando, con apoyo a guerras ilegales y fotografías que cuestan cientos de vidas. Pretenden hacerlo declarando públicamente que hay inmigrantes de distintas categorías y valorando a las personas por su estatus. Pretenden hacerlo así. Pues me alegro enormemente de que sólo “pretendan”, porque el 9 de marzo la sociedad española, una sociedad multirracial, multicultural, progresista, positiva y soñadora les contestará rotundamente que no, que no nos callamos, y que ustedes hagan el favor de dejar de ladrar.

3 comentarios:

minglas dijo...

"porque el 9 de marzo la sociedad española, una sociedad multirracial, multicultural, progresista, positiva y soñadora les contestará rotundamente que no."
Ojala, nuestra sociedad fuese así ,pero creo que no vas a un bar o en taxi hace tiempo, a ver lo borricos que seguimos siendo. El PP lo sabe y de ahí que haga este tipo de propuestas.

ivanka dijo...

Si, yo también salgo a la calle, y hablo con la gente, y se que habrá muchas personas que caigan en la trampa de la política del terror. Pero somos más, y yo confío en el poder de la información, la verdad y la palabra, y contra eso el PP no puede hacer nada. Por eso hay que trabajar mucho hasta el 9 de marzo :)
Un saludo

Alberto Ginel Saúl dijo...

Contestación a tu amable comentario en mi blog:

Te comprendo a la perfección. Sé a que te refieres y por supuesto, no creo que quienes nos emocionamos (me incluyo sin reparo) ante la belleza de las palabras "libertad", "igualdad", "progreso" y "democracia" estemos locos.

Todo lo contrario. Los locos son aquellas personas duras de corazón. Los que no ven en la política una oportunidad para la gente, para la sociedad y en especial para sus miembros más desfavorecidos. Una oportunidad para la realización y la felicidad, que son el fin último de nuestra existencia... si no que solo ven una oportunidad personal para medrar, de incrementar su ego. Una ocasión para "forrarse" como decía Zaplana.

Los que de verdad vivimos la política y nos levantamos a las 7 de la mañana un domingo para organizar todo lo necesario para un mitin, los que nos emocionamos y los que en algún momento incluso decidimos dejar de tragar las lágrimas para dejarlas marchar, sabemos que la política en Democracia es mucho más.

Por eso el lema "defender la alegría" me parece perfecto, idóneo. Mirar atrás en la Historia de nuestro ajado país y comprobar todo lo que hemos avanzado es la mayor alegría. Y tenemos que defender esta alegría que nos proporciona el progreso, las metas alcanzadas.

Mirar al futuro y contemplar todo lo que queda por hacer... despierta en nosotros infinitos motivos para creer en este país y en nuestras ideas.

Un saludo compañera. Estaría encantado de conocerte :)
Un fortísimo abrazo desde Alcorcón.