Hoy es un día desordenado, que no un mal día. Es un día de esos en que todo está bien pero no está colocado en su sitio donde estaría perfecto. Un día raro que lo llamarán algunos... para mi es un día desordenado.
Y en mi profundo desorden no consigo dormir, pero como no tengo nada en su sitio pues tampoco sé con exactitud qué es lo que me impide meterme en la cama para despertarme en ocho horas.Así que me da por pensar... pensamientos desordenados, por supuesto, no podrían ser hoy de otra manera. Total, que a la única conclusión que llego es que el mundo es demasiado simple para quienes lo complican y demasiado complicado para los que lo necesitan simple... Y mientras tanto la Iglesia seguirá buscando la forma de, ¿cómo era aquello? “Matar moscas con el rabo”.
1 comentario:
muy bueno!
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